Nuestro bosque
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

Nuestro bosque

El valor de nuestro corazón no se mide por distancia o tiempo, sino por las estrellas valiosas que entregan en forma de amistad.
 
ÍndiceÍndice  Últimas imágenesÚltimas imágenes  RegistrarseRegistrarse  ConectarseConectarse  Si los tiburones fueran personas, Bertolt Brecht Table_background_specials  
Bienvenidos a Nuestro Bosque (el corazón del tigre y la flor)

 

 Si los tiburones fueran personas, Bertolt Brecht

Ir abajo 
AutorMensaje
El tigre y la flor

El tigre y la flor


Cantidad de envíos : 26
Fecha de inscripción : 29/11/2008

Si los tiburones fueran personas, Bertolt Brecht Empty
MensajeTema: Si los tiburones fueran personas, Bertolt Brecht   Si los tiburones fueran personas, Bertolt Brecht Icon_minipostedMiér Abr 01, 2009 12:54 pm

Si los tiburones fueran personas harían construir en el mar unas cajas enormes para los pececillos, con toda clase de alimentos en su interior, tanto vegetales como animales. Se encargarían de que las cajas tuvieran siempre agua fresca y adoptarían toda clase de medidas sanitarias. Si por ejemplo, un pececillo se lastimara una aleta, le pondrían inmediatamente un vendaje de modo que el pececillo no se les muriese a los tiburones antes de tiempo. Para que los pececillos no se entristecieran, se celebrarían algunas veces grandes fiestas acuáticas, pues los peces alegres son mucho más sabrosos que los tristes.

Por supuesto, en las grandes cajas habría también escuelas. Por ellas los pececillos aprenderían a nadar hacia las fauces de los tiburones que andan perezosamente tumbados por alguna parte. La asignatura principal sería, naturalmente, la educación moral del pececillo.

Se les enseñaría que para un pececillo lo más grande y lo más bello es entregarse con alegría, y que todos deberían creer en los tiburones, sobre todo cuanto éstos les dijeran que iban a proveer un bello futuro. A los pececillos se les haría creer que este futuro sólo estaría garantizado cuando aprendiesen a ser obedientes. Los pececillos deberían guardarse muy bien de toda inclinación vil, materialista, egoísta y marxista; y cuando alguno de ellos manifestase tales desviaciones, los otros deberían inmediatamente denunciar el hecho a los tiburones.

Si los tiburones fueran personas, también habría entre ellos un arte, claro está. Habría hermosos cuadros a todo color de las dentaduras de los tiburones y sus fauces serían representadas como lugares de recreo donde se podría jugar y dar volteretas. Los teatros del fondo del mar llevarían a escena obras que mostrasen a heroicos pececillos nadando entusiásticamente en las fauces de los tiburones y la música sería tan bella que a su son los pececillos se precipitarían fauces adentro, con la banda de música delante, llenos de ensueños y arrullados por los pensamientos más agradables. Tampoco faltaría la religión.

Ella enseñaría que la verdadera vida comienza verdaderamente en el vientre de los tiburones.

Y si los tiburones fueran personas los pececillos dejarían de ser, como hasta hora, iguales. Algunos obtendrían cargos y serían colocados encima de los otros. Se permitiría incluso que los mayores se comieran a los más pequeños. Eso sería delicioso para los tiburones, puesto que entonces tendrían a menudo bocados más grandes y apetitosos que engullir. Y los pececillos más importantes, los que tuvieran cargos, se cuidarían de ordenar a los demás. Y así habría maestros, oficiales, ingenieros de construcción de cajas, etc. En pocas palabras, si los tiburones fueran personas, en el mar no habría más que cultura.

Bertolt Brecht. “Historias de almanaque”.
Volver arriba Ir abajo
 
Si los tiburones fueran personas, Bertolt Brecht
Volver arriba 
Página 1 de 1.

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Nuestro bosque  :: Corazón del tigre y la flor-
Cambiar a: